Un policía dispara en una escuela católica de Pakistán y mata a una niña de 8 años

ACN.- Un oficial de policía que custodiaba una escuela católica para niñas en el noroeste de Pakistán disparó contra un autobús escolar que transportaba a profesores y estudiantes, matando a una niña de 8 años. Al menos otras seis niñas y una mujer resultaron heridas en el tiroteo, que tuvo lugar en Sangota, en la región del valle de Swat, que se encuentra en la provincia de Jáiber Pastunjuá. El ataque se ha producido en el Colegio Público Sangota, una institución católica, administrada por la diócesis de Islambad-Rawalpindi, según informa Asia News.

Esta es la misma región de donde proviene Malala Yousafzai, la activista que ganó el Premio Nobel de la Paz por hacer campaña contra la prohibición de la educación de las mujeres impuesta por los talibanes paquistaníes, del grupo Tehreek-e Taliban Pakistan o TTP). En 2012 ella también había sido alcanzada en la cabeza por un balazo mientras viajaba en el autobús para ir del colegio a su casa, mientras que unos años antes la misma institución católica, el Colegio Público Sangota, había tenido que cerrar por amenazas y atentados terroristas.

El policía que abrió fuego contra las estudiantes ayer fue arrestado e identificado como Muhammad Alan Khan. El motivo que provocó la violencia no está claro: mientras que un oficial de policía descartó que se tratara de un ataque militante , el jefe de policía del distrito dijo que se había abierto una investigación. Según reconstruyeron los diarios locales, Alan Khan trabajaba en la escuela desde hacía tres meses, luego de haber sido suspendido dos veces por la policía por razones que por el momento no están claras.

Adil Ghouri, presidente del Movimiento de Concienciación Cristiana (Masihi Tehreek-e Beadari), junto con otros activistas cristianos han condenado el incidente y han reclamado la intervención del gobierno provincial.

Una escuela católica amenazada

Establecida en 1962, la Escuela Secundaria Pública Católica (más comúnmente conocida como Escuela Pública Sangota), se originó bajo la dirección de la Diócesis de Islamabad-Rawalpindi y ha sido administrada durante mucho tiempo por las Hermanas Irlandesas de la Presentación de la Santísima Virgen María. Convertida en una institución solo para mujeres en la década de 1990, fue arrasada en 2009 por un ataque de fundamentalistas islámicos que no causó víctimas solo porque las monjas ya habían evacuado a las alumnas. Dos años antes, el director había recibido una carta amenazante firmada por el grupo militante islámico radical Jan Nisaran-e-Islam acusando a las hermanas de convertir a las niñas musulmanas al cristianismo, a pesar de que el 99% de los estudiantes eran en realidad musulmanes. Solo en 2012, junto con las operaciones antiterroristas del gobierno pakistaní, la escuela pudo reabrir, inicialmente con solo tres monjas y 80 niñas. Hoy acoge a más de 800 estudiantes, 4 hermanas, 26 profesores y otros 10 empleados.

Sin embargo, los expertos coinciden en que la reconquista de Afganistán por parte de los talibanes en agosto de 2021 ha galvanizado al TTP y a otros grupos terroristas que operan en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa (KP) y otras zonas fronterizas, como Baluchistán. Según datos del South Asia Terrorism Portal, en 2022 se registraron 527 muertes (entre civiles, personal de las fuerzas armadas y terroristas) en el PK, frente a las 300 muertes del año anterior.

Aumentan los ataques fundamentalistas

Una tendencia creciente que vuelve a niveles preocupantes, mientras el país sufre una nueva crisis política entre el ejecutivo y la oposición. Los ataques terroristas han aumentado de 168 en 2021 a 225 en 2022, con el consiguiente aumento de episodios también más violentos. Según los datos difundidos por el departamento antiterrorista de Peshawar, en los primeros cuatro meses de 2023 se llevaron a cabo 180 atentados terroristas en la misma provincia, frente a los 133 del último cuatrimestre del año pasado.

En términos de bajas militares, el número de víctimas de 2022 en la última década, siendo diciembre el mes más mortífero en 10 años. Las fuerzas de seguridad paquistaníes son el objetivo de los terroristas porque representan al gobierno central. El objetivo del TTP es de hecho la creación de un emirato islámico sobre el modelo afgano en el que está en vigor la sharia, la ley islámica.