ACN apoya a miles de religiosas en todo el mundo
Más de 660.000 mujeres consagradas de diversas partes del mundo dan su vida al servicio de Dios, mediante la oración y entrega a los demás
ACN.- La vida religiosa es el corazón palpitante de la Iglesia. Afecta la vida de muchos en todo el mundo. Las mujeres extraordinarias que abrazan el Evangelio y responden al llamado a ir «y proclamar las Buenas Nuevas a toda la creación» (Mc 16, 15). El Papa Francisco ha señalado en varias ocasiones que “donde hay religiosos, hay alegría”. Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) es testigo directo de ello, ya que cada año recibe 800 peticiones de proyectos para religiosas.
Un total de 13.862 religiosas se benefician directamente de nuestra ayuda de subsistencia y formación en 85 países, contando también con los beneficios indirectos que reciben en proyectos de medios de transporte, construcción o reparación de iglesias, monasterios, seminarios y conventos.
Hoy en día existen 4.416 hermanas en formación, 1.035 en formación de novicias, 3.529 ayuda existencia para hermanas activas, 2.190 ayuda de existencia para hermanas contemplativas y 2.692 retiros para hermanas que se encuentran recibiendo apoyo de Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN).
Según el Anuario Estadístico de la Iglesia, muchas de estas religiosas, además, desempeñan su misión en lugares donde los conflictos armados y la pobreza han lacerado las vidas de millones de personas. Son esperanza y testimonio fuerte del amor de Dios hacia los más olvidados y desposeídos.
El amor todo lo puede
La hermana Cécire es una de ellas perteneciente a la congregación de “Hermanas Palotinas” nacida de Masaka, ubicado en Uganda cuenta que “Podría haber tenido una familia, pero no sería suficiente para mí. El amor en mí es mayor. El amor de Dios me inunda y se desborda. Me siento libre de amar a todos. Mi familia es más grande que los lazos de sangre. Mi familia es toda mi aldea,».
También añadió que «Cuando amas, y haces todo con amor, no te sientes cansado porque estás feliz de compartir lo que has recibido». Ella se en encuentra en Ruanda siento testimonio vivo del evangelio para muchas personas que necesitan de la palabra de Dios
Servir a Cristo por medio de los demás
La religiosa Samia Syiej de la “Congregación del Sagrado Corazón de Jesús y María”. Nació y se crió en Uzeir, una aldea árabe en la parte norte de Israel. En su testimonio nos cuenta que “Elegí unirme a la congregación porque sirve a las personas. Cada pequeña cosa que hacemos es para la mayor gloria de Dios. La congregación está activa en Siria, Líbano, Marruecos, Argelia y Chad. Su vocación es «estar en el mundo dando testimonio de Jesucristo para aquellos que creen en Dios y también para aquellos que no lo hacen».
«Una de las Hermanas en mi comunidad a menudo dice que tenemos que servir al Cristo en los demás con humildad hasta que no quede nada de nosotros y todo lo que quede sea Él”, dijo la hermana Samia quien actualmente se encuentra sirviendo a Cristo por medio de los más necesitados en Siria.
Ellas son testigos del amor sublime e ilimitado de Dios y lo hacen gracias al mismo Espíritu Santo que inspira, el mismo Evangelio que se vive y se anuncia, el mismo Jesús que está presente en los pequeños. Las Hermanas son testigos vivientes del amor de Dios, pero necesitan de nuestras oraciones y apoyo financiero para su misión evangelizadora.