Oración por Cuba y su Iglesia
Santa María de la Caridad
que viniste como mensajera de paz
flotando sobre el mar.
Tú eres la Madre de todos los cubanos
A ti acudimos, Santa Madre de Dios
para rogarte por las familias,
por la patria y por la Iglesia cubana.
Alcánzales de tu Hijo
la concordia y la unidad.
Que los enfermos, los presos
y todos los que viven angustiados
encuentren en Él consuelo y fortaleza.
Bendita entre todas las mujeres
y bendito Jesús, el fruto de tu vientre.
A Él la gloria y el poder
por los siglos de los siglos.
Amén.
Oración de súplica a la Virgen de la Caridad del Cobre
Señor Jesús, hoy venimos ante Ti, para agradecerte
que estés siempre presente en medio de nosotros.
Gracias, porque te encontramos en el amor de los esposos fieles;
de los padres y madres que están con sus hijos
y los educan en la fe, la verdad y en la caridad;
de los hijos que atienden con cariño a los ancianos de la casa;
de quienes desde otras tierras ayudan a familiares y amigos;
de los vecinos que se acompañan en penas y alegrías;
de tantos que sirven desinteresadamente a sus prójimos.
Ayúdanos a sentir el consuelo y la fortaleza en estos tiempos tan difíciles.
Te presentamos a las madres que luchan por alimentar a sus hijos;
a tantos que no se cansan de buscar medicinas para sus enfermos;
a los familiares de los presos que sueñan con verlos regresar al hogar;
a los trabajadores que intentan brindar a sus seres queridos una casa digna;
a los que lloran la emigración de esposos, hijos, nietos, amigos;
a los que sufren la violencia y el robo;
a los que soportan tantas carencias materiales y espirituales.
Aumenta nuestra fe, para tomar conciencia de que para Ti nada es imposible.
Envía tu Espíritu Santo para que todos los cubanos,
con las potencialidades que nuestro pueblo tiene,
aprendamos a vivir en armonía, en un solo corazón y una sola alma,
con diferentes maneras de pensar, y, juntos, encontrar soluciones
que nos conduzcan a nacer en paz, a trabajar, a comer y a morir en paz.
Santísima Virgen de la Caridad, Madre de nuestro Señor Jesús,
presenta a tu Hijo nuestras oraciones, y dinos: “Hagan lo que Él les diga”.
Madre de todos los cubanos, repítenos nuevamente:
“No tengan miedo, ¿acaso no estoy yo aquí que soy tu Madre?”
¡Jesús, Buen Pastor, escúchanos!
Conferencia de Obispos Católicos de Cuba
La Habana, 15 de abril de 2024.